¡Hola, chicas!
El verano es la temporada en que descubrimos los hombros, las piernas y la espalda. Tomamos sol en la playa y usamos sandalias. Si desea exponer la piel y descubrirla después del invierno, una rutina de cuidado de la piel adecuada es imprescindible. Los talones necesitan mucho cuidado y atención; se vuelven secos y ásperos, la piel se vuelve callosa y agrietada. Es por eso que vale la pena tener una buena piedra pómez. ¿Cómo usarla de la manera correcta?
¿La piedra pómez es el hábitat de bacterias y hongos?
¿Hay un lugar libre de estas desagradables cosas? La piedra pómez proporciona las condiciones ideales para su desarrollo: humedad, piedra volcánica, muchos agujeros y canales. Solo piensa: transfieres los gérmenes de la piedra pómez a su piel. En casos extremos, esto puede provocar irritación y enfermedades dermatológicas graves. Para evitar situaciones tan desagradables, recuerda secar y desinfectar la piedra pómez después de cada uso. Los dermatólogos desaconsejan utilizar tales dispositivos para eliminar la piel callosa. Recomiendan articulos eléctricos o de dos caras.
¿Cómo usar y limpiar la piedra pómez?
No compartas tu piedra pómez con nadie. Debe ser tu gadget privado. Si varias personas usan una piedra pómez, el riesgo de hongos u otras afecciones dermatológicas aumenta automáticamente.
Remoje los pies en agua antes de eliminar la epidermis rugosa. De esta manera, hará que todo el tratamiento sea más agradable y más corto; los efectos serán mejores Después de exfoliar la piel, recuerde lavar bien y secar la piedra. Use agua tibia, un cepillo y jabón para fregar y eliminar las sobras de la epidermis. Luego, sécalo al sol; evite la fuente de humedad y olvídese de ponerlo en el fregadero. Desinfecte la piedra pómez con un producto especial de vez en cuando. Reemplácelo por uno nuevo cada tres meses.
¿Con qué frecuencia debe usar piedra pómez?
Una vez por semana es suficiente. Gracias a la exfoliación, eliminarás los callos y las células muertas de la piel. Recuerda no utilizar movimientos demasiado enérgicos que puedan causar irritación o alteración en la reparación de la epidermis. Si padece diabetes o insuficiencia circulatoria, el uso demasiado intenso o frecuente de la piedra pómez puede causar complicaciones graves.
